Los 5 modelos del BCRA para una mayor oferta de viviendas

El Presidente de la autoridad monetaria argentina -Federico Sturzenegger- propuso a empresarios de la construcción cinco modelos posibles para una mayor oferta de viviendas. 

Durante su ponencia en el marco de la 65° Convención Anual de la Cámara Argentina de la Construcción (CAC), Sturzenegger sostuvo que ante un nuevo contexto se requiere “pensar en una oferta que llegue de manera más amplia a todo el conjunto de la población”.

“Se acabó el país que sólo construía para los ricos. Cuando ustedes terminen de convencerse que el negocio de los próximos 20 años es eliminar el déficit habitacional del país, habremos comenzado a avanzar de manera importante en resolver uno de los problemas estructurales de Argentina”, lanzó el economista ante los empresarios de la construcción.

En ese sentido, enumeró cinco modelos posibles para una mayor oferta de viviendas.



Según explicó el titular del BCRA, una característica que llama la atención de los urbanistas que visitan Buenos Aires es su bajo nivel de densidad.

“A pocas cuadras del obelisco podemos encontrar una vivienda unifamiliar. Si piensan en París, pueden recorrer manzanas y manzanas enteras sin encontrar algo así. La diferencia está en la densificación, y con ella se optimiza el uso de su infraestructura de transporte, eficientizando el uso de la ciudad”, precisó.

“Esta temática implicará la necesidad de avanzar en una densificación de la trama urbana. Esta densificación podrá extenderse a todos los rincones de la Ciudad. Incluso, podría pensarse en que zonas hoy consideradas marginales, puedan reconvertirse en importantes desarrollos urbanos, donde sus actuales moradores obtengan un participación en el proyecto final. Entonces, tanto la Ciudad como sus habitantes tendrán un salto cualitativo en su oferta habitacional, al tiempo que se eficientice el funcionamiento de la Ciudad en sí misma”, agregó



“Me imagino para nuestro país el desarrollo de soluciones urbanísticas de carácter extensivas, del tipo de urbanizaciones abiertas y cerradas, pero con el sello de una alta calidad urbanística. En otras palabras, un desarrollo inteligente que genere una alta calidad del espacio físico, aún si la casa que la ocupa no cueste más de 30.000 dólares”.

Este tipo de negocios, consideró, son factibles en zonas urbanas, especialmente en el interior del país, donde la incidencia del terreno es menor.



Sturzenegger sostuvo que u segmento que debería desarrollarse más es el de departamentos pequeños, para jóvenes solteros o matrimonios en sus primeros años. “Imagino edificios con estos departamentos en toda la traza del Metrobús de La Matanza o cerca de la estación de trenes de Ciudadela (a 25 minutos del centro de la Ciudad) o Berazategui (a 40 minutos de Constitución)”, sostuvo.

“Departamentos pequeños desplegándose por todo el conurbano y en sintonía con las mejoras en el transporte público. De esta manera se reduce la incidencia del terreno, abaratando los costos y generando una complementariedad  con el transporte público, sobre todo con la red de trenes y subterráneos, que eficientizará significativamente el funcionamiento de las ciudades”, agregó.



“Acá el negocio es el de una empresa que le ofrece derribar su casa y construirle en semanas una nueva vivienda de mejor calidad. Es fácil imaginar la demanda realmente ilimitada para este modelo de negocios, que, por otra parte, requiere la construcción de una ingeniería logística de precisión, ya que me lo imagino como una sucesión de equipos que van rotando de una casa a otra como una línea de producción. Excepto que, a diferencia de una línea de montaje en la que el producto llega al equipo, es el equipo el que va al producto. Primero el equipo demolición, segundo el equipo cimientos, y así sucesivamente”, explicó.

En este negocio, según evaluó el funcionario, “triunfará el que logre diseñar una técnica que logre terminar la casa en el menor tiempo posible, técnicas que seguramente requerirán el uso de materiales nuevos: la madera, el plástico y el vidrio, que se sumarán a los ya tradicionales”.



“Uno de los negocios más novedosos será el de las casas portables: esto es, casas semi-industriales con una estructura pasible de ser transportada de un lugar a otro”.

Indicó que el concepto ya existe para el segmento ABC1 e instó a “rediseñarlo para el segmento que hoy lo podría demandar masivamente”.

Entre las características a favor de este tipo de construcciones destacó: financiamiento con préstamos prendarios (no hipotecarios) abaratando costos y simplificando los trámites; puede ser comprado por quien no tiene su terreno escriturado, permitiéndole acceder a una vivienda aún antes de que pueda comprarse su terreno.

Sobre este último punto, subrayó la posibilidad de movilidad en caso de que el ocupante elija mudarse o adquiera un terreno en otro lugar.

“A su vez, si, como se espera, el interior de nuestro país sigue teniendo un diferencial de crecimiento, esto facilitará muchísimo el reflujo inmigratorio hacia esas zonas, sin que la familia pierda calidad de vida”, concluyó.