Los avances en la construcción impulsaron la creación de dispositivos que regulan mejor la temperatura y reducen el impacto energético: los ladrillos termoeficientes, materiales que permiten crear una vivienda sustentable y sana.
Existen distintos factores que mejoran la calidad de vida y hacen de una vivienda un lugar sustentable. Una de las más importantes es la calidad de la construcción, que está determinada por los materiales que se utilizan. Un punto clave es la envolvente: no es sólo una elección de diseño, sino que es un elemento fundamental para la habitabilidad y es el punto de inflexión en una construcción sustentable. Y la piel es bienestar interior. Por esa razón, crear una envolvente que genera una buena aislación es importante. Para que la construcción sea de la mejor calidad posible, es necesario utilizar materiales innovadores, como los ladrillos termoeficientes.
La pregunta básica es qué significa una pared bien aislada: garantiza el confort térmico y acústico, la salud interior y la vida útil de los materiales que la componen. Además, una correcta aislación térmica genera el consecuente ahorro en dimensionamiento y funcionamiento de equipos para climatización. Gran parte del consumo energético medio de una vivienda proviene de la calefacción y la refrigeración, lo que convierte a la aislación térmica en la variable clave en la construcción. Un adecuado aislamiento permite, además, grandes ahorros en las tarifas de gas y electricidad, al disminuir los consumos en calefacción y aire acondicionado.
Los productos de UNICER colaboran con el cumplimiento de las reglamentaciones nacionales de acondicionamiento térmico, el sello de conformidad norma IRAM y los requisitos del INTI.
Una vivienda mal aislada produce condensaciones de humedad que promueven el desarrollo de mohos y manchas de hongos. Estas condensaciones conspiran contra el confort interior y la calidad del ambiente y hasta pueden provocar o agravar enfermedades respiratorias.
Los ladrillos termoeficientes contribuyen a que eso no suceda. Las líneas de cerramiento Doble Pared y la línea portante Kimablock son utilizadas cuando se busca una máxima eficiencia en la construcción. Están realizados con arcilla cocida, que tiene propensión natural para absorber y liberar la humedad de la atmósfera. Además, contribuyen al diseño sustentable a través de su larga vida útil, la eficiencia energética, la durabilidad, el contenido de agregados reciclados, la disponibilidad local, el aislamiento acústico, los bajos residuos de construcción, y no contienen materiales tóxicos para la salud.
La principal diferencia con los ladrillos tradicionales es la ruptura del puente térmico que permite el ladrillo doble pared y el diseño de las celdas interiores en el caso del Klimablock su mayor espesor, permite incorporar mayor cantidad de celdas interiores. También generan una construcción más veloz.
Los ladrillos Doble Pared, especiales para cerramiento exterior, permiten hacer una construcción de doble muro con un solo ladrillo.
La ley 13.059 de la Provincia de Buenos Aires establece los términos de acondicionamiento térmico exigibles en la construcción, y los ladrillos termoeficientes colaboran a cumplir con la reglamentación vigente. Esta norma busca contribuir a una mejor calidad de vida de la población y a la disminución del impacto ambiental a través del uso racional de la energía.
Pero no es sólo el cumplimiento de la ley y sus características destacables lo que indica su efectividad. El coeficiente de eficiencia energética (K) determina la calidad del material con respecto a la energía que consume. Los ladrillos Klimablock y Doble Pared de Unicer tienen un coeficiente de 0.60 y 0.75, respectivamente. Cuanto menos sea el número, mayor eficiencia representa.
Es importante el retorno en ahorro energético. El beneficio es muy grande: por ejemplo, los ladrillos de la línea cerramiento, sin propiedades termoeficientes, tienen como mínimo un K de 1.49. Uno de la línea Doble Pared, en cambio, tiene un K de 0.75.
La tendencia de sustentabilidad en la construcción está cada vez más presente. La importancia de generar ambientes saludables es una de las prioridades para mejorar las condiciones de vida y seguir cuidando el medioambiente.
Acerca de UNICER
UNICER, un grupo nacional conformado por seis empresas fabricantes de ladrillos cerámicos, creado en 1995. Su misión fundamental es fortalecer la red de distribución comercial brindando un servicio de excelencia e integral a sus clientes Su principal compromiso se basa en la concientización de un sistema constructivo eficiente que pondere la innovación y la calidad del ladrillo cerámico. Se trata de las firmas Later-Cer (Pilar), Cerámica Quilmes (Quilmes), Palmar (Córdoba), Cerámica Cunmalleu (Rio Negro), Cerámica Fanelli (La Plata) y Cerámica Rosario (Rosario).
Fuente: http://www.construar.com.ar