Normas ISO para que las ciudades sepan como ser sustentables

ISO, la reconocida organización internacional para la estandarización de procesos, desarrolló unas normas sobre cómo mejorar la infraestructura comunitaria en base a tecnología de última generación que permitan darle sustentabilidad a las ciudades.Las ahora bautizadas ICI reducen los costos mediante un aumento de la movilidad y la accesibilidad y la reducción de los contaminantes ambientales, y el cuerpo normativo se hizo en base a un relevamiento de las distintas herramientas de gestión que se están aplicando en el mundo analizando su potencial de aplicación y medición.
El Instituto Argentino de Normalización y Certificación (IRAM) reconoce a las urbanizaciones en mega ciudades como una de las tendencias globales que están delineando el futuro de los negocios, y en algunos casos, el desarrollo desmedido de la población, alineados al crecimiento de las infraestructuras comunitarias pueden tener a veces un impacto negativo en la sostenibilidad.

 

 Las normas apoyan el rápido crecimiento económico en los países en desarrollo, exponiéndolos a las mejores prácticas que les permitan evitar la saturación de infraestructuras públicas y mejorar su funcionamiento integral, convirtiéndolas en mejores lugares para vivir.

 Ahora ISO es de gran utilidad porque realiza un relevamiento de las distintas herramientas de medición que se están aplicando en el mundo, analiza la relevancia de dichas herramientas y proporciona un mejor entendimiento de las infraestructuras disponibles con indicadores de servicio de la ciudad cómo: la educación, la energía, las finanzas, la recreación, emergencia de incendio, la respuesta, la gobernanza, la salud, la seguridad, los desechos sólidos, el transporte, la planificación urbana, aguas residuales y agua propiamente dicha. Por otro lado algunos de los indicadores de calidad de vida que se analizan son: la participación cívica, la cultura, la economía, medio ambiente, la vivienda, la equidad social, la tecnología y la innovación.

 El conocimiento de los proyectos existentes ayudará a otras comunidades a contar con respuestas y soluciones, recibiendo propuestas que de otra manera no hubieran conocido.